La ubicación de nuestro campo, con un nivel freático situado a tan solo 0,7 metros sobre el nivel del mar, provoca que, en episodios de lluvia superiores a 60 l/m², el suelo alcance rápidamente su capacidad de campo y varias calles sufran inundaciones temporales.
Para afrontar esta situación, estamos trabajando junto a la ingeniería ACCTUA Golf Services en el diseño de una solución basada en depresiones de césped. Estas zonas funcionarán como bunkers de hierba segada durante la mayor parte del año, manteniendo su valor estético y funcional. Sin embargo, en periodos de lluvias intensas actuarán como áreas de acumulación controlada de agua, evitando que se formen charcos en las calles principales.
Estas depresiones estarán conectadas mediante tuberías de drenaje a los puntos donde actualmente se generan los encharcamientos. De este modo, recogerán el exceso de agua y permitirán que las calles recuperen su jugabilidad en el menor tiempo posible.
A lo largo del año, realizaremos un seguimiento exhaustivo del comportamiento del nivel freático en distintas zonas del campo. Esta información será clave para gestionar mejor esta problemática tanto en el presente como con vistas al futuro, optimizando nuestras decisiones de gestión hídrica y mantenimiento.